Decir que Ramón Peinador Aguilar es un enfermo de Parkinson es no decir nada sobre él, sino sobre la enfermedad con la que ahora convive.
Este madrileño de nacimiento y zaragozano de adopción, fue desde niño, y sigue siendo, curioso, observador y estudioso de la naturaleza, del comportamiento de los seres vivos, del funcionamiento de las cosas.
Quizá por eso quiso ser enfermero, para conocer a fondo la máquina más perfecta, el cuerpo humano, y cuidar con dedicación al ser que en él habita.
Amante de la música, de toda, o casi toda, de la fotografía, de la montaña más que del mar, de la buena comida y el buen vino, si es posible, bien acompañado. Hay tantas cosas que le gustan que llenaría todo el espacio.
Desde que a ratos le tiemblan las manos, ha salido a la luz el artesano, el artista que había en él y hace todo tipo de manualidades con madera, cuero, corcho, cualquier cosa le sirve para algo. Dibuja y experimenta con distintos materiales, pinta paisajes, mandalas, alfabetos.
Amante de su familia, mascotas incluidas, padre exigente, pero presente, compañero del alma.
Si te acercas a él, ten por seguro que te llevas una explicación de algo que no sabías, o que nadie te había contado así.
Merece la pena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por tu aportación